LA DIVISIÓN TRANSEUROPEA, QUE ABARCA 22 PAÍSES, SE ORGANIZÓ POR PRIMERA VEZ EN 1928 Y SE REORGANIZÓ POR ÚLTIMA VEZ EN 2012.
Europa es el segundo continente más pequeño del mundo en cuanto a masa terrestre, ya que sólo ocupa un 2% de la superficie de la Tierra. Sin embargo, en términos de población, es el tercer continente más grande (después de Asia y África), con una población de unos 733 millones de habitantes, es decir, alrededor del once por ciento de la población mundial.
En medio de una población de unos 205 millones dentro de esta división, hay unos 87.000 miembros adventistas del séptimo día que celebran su culto en 1.300 iglesias.
Se trata también de una región muy diversa, en la que la mayoría de la población vive en países muy secularizados. Incluso en los países en los que la cultura religiosa sigue siendo fuertemente ortodoxa o musulmana, predomina cada vez más una visión secularizada del mundo.
En este contexto, los miembros de la Iglesia Adventista siguen siendo apasionados a la hora de compartir su fe. Aunque los métodos tradicionales de evangelización no son tan eficaces como en el pasado, los pastores y los miembros laicos trabajan juntos para buscar formas de influir en las vidas de los que les rodean. Esto incluye los Centros de Influencia, el programa de salud y familia, y el programa de Conquistadores que mira hacia el exterior, así como un sinfín de proyectos de siembra de semillas que, con la participación activa de los miembros laicos, conducen a la plantación de iglesias, al crecimiento y al reavivamiento.